El segundo libro que leí este año fue "La puta de Babilonia", de Fernando Vallejo, en edición de Alfaguara.
Una lapidaria crítica a la iglesia católica y a sus dirigentes, empezando desde el mítico Pedro hasta el reciente Benedicto XVI; el relato está lleno de datos históricos reales, citas y traducciones -aunque no referenciados- que muestran la cara oculta de lo que tradicionalmente se enseña como dogma del catecismo. La consigna del autor es "duro y a la cabeza". Su análisis detallado de los textos bíblicos, sus inconsistencias e incongruencias, resulta sobrecogedor.
Con frases muy ingeniosas y una prosa ligera que más bien parece lenguaje coloquial (en el que, por cierto, se abusa de los exabruptos), el autor hace desfilar ante los ojos del lector todas las historias negras de papas, cardenales, obispos, dirigentes de congregaciones, santos, instituciones y similares; y ya encarrerado, arrea también contra judios y musulmanes.
Es un libro muy interesante, muy recomendable para leer si se desea tener una mente abierta a la búsqueda de la verdad sin la ceguera del dogma... porque "no es la fe, sino la duda, lo que lleva a la verdad".
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